Me consta que en el valle del Pas los pastores bien podían transportar las vacas en brazos. O escalar kilómetros de montaña detrás de ellas sin inmutarse. ¡Los muy cántabros inventaron los superpoderes! No es la pócima secreta de la aldea gala, pero es algo equivalente, porque la cantidad de energía que se concentra en un solo sobao pasiego ha de ser como mínimo equivalente a lo que se cuece en un reactor nuclear.
Son las cosas que pasan allí donde hay más mantequilla que harina. Si también hay más azúcar que harina ya está liada. Desayunas tal cosa y no hay quien te pare. Porque además es difícil ser frugal con los sobaos. Solos o mojados en café con leche, son sublimes. Vale que en nuestros días -al menos los no cántabros- no solemos transportar ganado en brazos y tal vez por eso el sobao se nos queda algo grande en lo calórico. También es posible que el deporte en Occidente se inventara para justificar los sobaos. La ecuación no falla: azúcar + mantequilla + sal= felicidad. Y los sobaos la dan. El amasado se convierte en un gozoso chapoteo y lo que sale del horno es un vicio difícil de dejar.
No hay complicación alguna más allá de la hora de papiroflexia necesaria para hacer los moldes individuales. En caso de urgencia, no te cortes, unta con mantequilla o forra con papel de horno un molde grande y bajo y haz un sobao familiar. Hazlos como quieras, pero hazlos, y si tienes sentimiento de culpa por tanto placer calórico, haz deporte, corta leña o traslada vacas.
Lo importante es que pruebes una receta que, aunque lo parezca, yo no ubicaría dentro de la flexible categoría de las magdalenas. El sobao forma parte de otro olimpo, más cercano en espíritu a los shortbreads y a los grandes bizcochos centroeuropeos de mantequilla. Como todos ellos, una preparación de origen humilde, que no pobre, a la que se le ven a la legua las hechuras de casa grande.
Unos sobaos pasiegos de lujo
¿QUÉ VAS A NECESITAR?
Ingredientes
- 225 g harina de repostería El Amasadero
- 250 g mantequilla
- 250 g azúcar
- 25 g miel
- 3 huevos enteros
- 5 g sal
- 1 ralladura de un limón o una cucharada de extracto de limón.
- 10 g polvos de hornear (levadura tipo Royal)
Elaboración paso a paso
- Saca con tiempo la mantequilla de la nevera para tenerla a temperatura ambiente. Añade el azúcar y mézclalos con las manos en un bol grande.
- Agrega los huevos y la miel y sigue mezclando. Cuando esa masa líquida sea homogénea añade el resto de los ingredientes y sigue amasando (o mejor dicho, chapoteando) hasta conseguir una especie de crema.
- En algún momento ponte a hacer papiroflexia y a preparar las cajitas individuales. Las hice recortando cuadrados de 16,5 centímetros de lado. Esa medida se debe a que el papel de hornear de El Amasadero mide 33 de ancho, así que para ahorrar recortes lo dividí al medio. Lógicamente, puedes hacer los sobaos del tamaño que quieras.
- En la foto verás paso a paso cómo se hacen. Primero dobla dos lados hasta el medio. Pliega sobre sí misma cada una de esas dos solapas para marcarlas y vuelve a estirarlas después. Dobla ahora solapas de unos 2 centímetros en los otros dos extremos. Con esas marcas lo tienes listo: abre con cuidado y crea una de las esquinas, el pequeño triángulo que te resta dóblalo hacia un lateral y dobla también el papel que sobresale en altura para crear la forma de la caja. Repite lo mismo en el resto de las esquinas. Sí, es un lío explicarlo así, por eso está la foto.
- Te quedarán así de bonitos.
- Lleva ahora la masa a cada uno de los moldes, rellenándolos hasta la mitad de su altura, ya que después subirán en el horno. Puedes hacer esta operación con una manga pastelera, con una espátula o con la mano. No te mates muchos a la hora de extender la masa, porque con el calor del horno se pondrá todavía más líquida y se extenderá ella sola.
- Dispón los sobaos en una bandeja de horno y hornea a la altura de las guías inferiores (y si no tiene guías, en la segunda altura contando desde abajo). Déjalos a 180 grados durante 20 minutos. Ten cuidado, porque si se pasan, se secan, y es una lástima. Ahora sácalos, déjalos enfriar, y ya me dirás si valió la pena o no.
Hace mucho tiempo tengo esa receta, la verdad es muy fácil,
la única diferencia con los que yo hago, es que los míos llevan
un chorrito de anís, así me la dieron y así los hago. Supongo
que como todo, cada casa tenía su versión y todas buenas
Es cierto que no se si es por «sobarlos» pero llevan muy poquita
levadura o leudante,porque si te pasas quedan demasiado aireados,
como que se desgranan, el sobao es compacto, aireado pero compacto
Un verdadero placer, eso si una maratón después
Gracias por la aclaración, Rosa. Si he entendido bien, el truco es revolver a conciencia, ¿no?
Hay que amasar o sobar hasta que la mantequilla se caliente con las
manos y se integre todo bien.
A mi me enseñaron que no se añade un huevo hasta que el anterior
no está totalmente integrado
Hay que pringarse las manos, pero merece la pena
Me encanta pringarme metiendo las manos en la masa. Lo probaremos como tú dices.
Hola;
Han quedado deliciosos.
Gracias
No se mucho sobre cocina tradicional pero siempre me he preguntado como se harían estas recetas en realidad en la cocina tradicional. Lo que quiero decir es que no me imagino a mis bisabuelos con levadura química de sobre ¿o si? ¿cuál es la alternativa?
Leire, la primera fábrica del mundo de leudante químico es del 1846 y ya hay referencias al uso de leudantes químicas en 1796. En algún momento las amas de casa tuvieron que adoptar los leudantes químicos porque daban menos trabajo que montar claras o depender de la fermentación poco predecible de levaduras naturales, que son las dos alternativas que se me ocurren.
No tenía ni idea. Muchísimas gracias!!
No es que tenga nada en contra de este tipo de levadura ni mucho menos, la he usado siempre. Pero siempre me he preguntado como se hacen las cosas cuando los recursos a mano son otros.
Leire, ¿has visto el comentario sobre una receta familiar que dicen que hay que sobar la masa para no usar levadura? Estoy esperando una explicación más detallada. A ver si hay suerte y nos contesta.
Sería estupendo. Gracias por el feedback !
Como dice la copla, Pasieguco soilo, soilo, aunque no lleve vacas al hombro… jaja. Os puedo decir que la receta de mi familia no lleva levadura, y puedo asegurar que no es necesaria si se «soba» bien la masa.
Muchas gracias, Perikote. ¿Nos podrías explicar cómo se soba la masa?
Una cosita más, ahora que caigo (o dos, con vuestro permiso):
– los huevos ¿de qué tamaño?¿L o M?
– ¿el azúcar es blanquilla o se puede usar otra como panela?
Gracias!!
Elena, huevos medianos y azúcar blanquilla. Supongo que puedes usar panela o mascabado, aunque quedarán más oscuros y con sabor a melaza.
¿Se pueden hacer con aceite de oliva? (es broma!! ajjajajjj) Muchas gracias por la receta: llevo toda la vida queriendo hacer sobaos y me echaba para atrás el que no te vendieran por ninguna parte las cápsulas, así que asi más que la receta agradezco el tutorial para hacerlas. Sí; ya sé que puedo hacer el megasobao en un molde grande, pero ¿conocéis alguien que haga una megamagdalena? Mmnnno es lo mismo.
Lo explicáis tan sencillo, que habrá que probarlos.
Sólo un apunte para que se asemejen aún más a los originales: aquí en Cantabria suelen entrar 6 sobaos en un paquete de kilo, y están tan ricos que es fácil comer uno de una sentada, espero que los vuestros me salgan por lo menos parecidos.
Como innovación, últimamente están apareciendo sobaos con otros sabores, como unos de kilo de una sola pieza, con arándanos, que hace una tradicional casa de sobaos y quesadas
Saludos
Javi, no dudes en sugerir mejoras si ves que no quedan como deben.
Buenas noches,
Me podrían decir q papel usais ??
Mil gracias
Olalla, este:
https://www.elamasadero.com/773-rollo-de-papel-de-horno-siliconado-198m-x-33cm.html