El panettone es una de esas recetas que parecen difíciles y que, de entrada, asustan. Sin embargo, es sencillo hacer un panettone espléndido siguiendo unos pasos bien definidos y teniendo algo de paciencia (y algún truco) con las fermentaciones. Para elaborar panettoni hay mil recetas que se pueden clasificar en dos grupos básicos: los que llevan demasiadas cosas y muy poca harina y al revés. Aquí hemos buscado un equilibrio entre ambas para que el panettone no pierda su esencia de pan y para que su miga ligera nos ofrezca su característica explosión de sabor.
Es posible, si has probado los industriales que venden en supermercados, que creas que no te gusta, pero prueba este y verás. Si no te va la naranja confitada (harás mal) siempre puedes sustituirla, por ejemplo, por pasas y nueces o por alguna otra fruta confitada más de tu agrado. La clave para que salga bien es contar con una harina de gran fuerza que sea capaz de soportar la arquitectura de mantequilla, yemas y azúcar que le va a caer encima. Un correcto formado en forma de bola le dará la característica forma de misil, aunque si no te queda perfecto, no te desesperes, estará igual de bueno. Tener una masa madre bien activa y respetar los largos tiempos de fermentación completan las normas. Bueno, falta una: no escatimes en la calidad de los ingredientes: mantequilla buena, huevos frescos y las mejores frutas que encuentres van a ennoblecer ese hermoso torpedo. La única pega que tiene es que, ya te imaginas, vas a necesitar unas cuantas horas de gimnasio para poder recuperar la línea.
Panettone perfecto de masa madre en seis pasos
¿QUÉ VAS A NECESITAR?
- 1 frasco de cristal
- 3 boles
- 1 báscula
- 1 cámara de fermentación doméstica (opcional, pero realmente recomendable)
- brochetas de madera o de metal o agujas de calcetar
Ingredientes
Para el prefermento de la masa madre
- 40 g masa madre
- 200 g harina manitoba de gran fuerza El Amasadero
- 100 g agua
Para los aromas
- 20 g miel
- ralladura de media naranja
- ralladura de medio limón
- 1 cucharadita de café esencia de vainilla
Para la primera masa
- 200 g prefermento de masa madre (lo que sobre, guárdalo en la nevera)
- 500 g harina manitoba de gran fuerza El Amasadero
- 100 g agua
- 100 g leche
- 100 g mantequilla
- 60 g yemas de huevo
- 2 g sal
- 70 g azúcar
Para la segunda masa
- todo lo anterior
- 150 g harina manitoba de gran fuerza El Amasadero
- 90 g azúcar
- 150 g mantequilla
- 100 g yemas de huevo
- 12 g sal
- 3 g malta suave El Amasadero (para dar color. Opcional)
- 200 g pasas ecológicas El Amasadero
- 125 g fruta confitada El Amasadero
Elaboración paso a paso
- Prepara la masa madre con la que tengas en casa (40 gramos) y añádele 100 gramos de harina Manitoba y 50 de agua. Amasa y deja fermentar en forma de bola en un bol pequeño.
- A las cuatro horas haz un refresco con 50 gramos de esa masa y otros 100 gramos de harina y 50 más de agua. En otras cuatro horas más la tendrás lista.
- Al tiempo que empiezas con la masa madre, prepara los aromas: junta en frasco la miel con la vainilla y las ralladuras y déjalo cerrado hasta el día siguiente.
- Para la primera masa vierte el agua y la leche sobre 200 gramos del prefermento de masa madre que has preparado en los pasos 1 y 2 y remueve un poco para ablandarla, añade después el resto de los ingredientes, con la mantequilla en pomada, es decir, derretida (vale en el microondas 30 segundos o en un cazo al fuego un minuto) y como mucho tibia, pero nunca caliente. Amasa unos minutos hasta que esté todo bien mezclado y la textura sea homogénea.
- Déjalo reposar 12 horas o hasta que triplique su tamaño.
- Para la segunda masa junta los aromas con la miel, la mantequilla, el azúcar, las yemas de huevo, la sal y la malta (opcional) en otro bol. Mézclalo bien con una cuchara. Cuando lo tengas, vierte ese líquido sobre la primera masa
- Vete amasando para que se vaya absorbiendo. Bastan un par de minutos. Echa entonces la harina y sigue amasando hasta lograr un masa blanda. Estírala un poco sobre la mesa y agrega las frutas cortadas en daditos. Continúa amasando hasta que las pasas, la naranja y la cidra estén uniformemente distribuidas.
- Mételo de nuevo en el bol y déjalo reposar una hora.
- Divide con la rasqueta la masa en tres partes iguales de unos 600 gramos cada una.
- Amasa cada pieza sobre la mesa y dale forma de bola, interesa que quede bien redonda y prieta. Si se pega mucho a la mesa, enharina un poco la superficie con Manitoba. Cuando lo tengas, mete cada bola en su molde.
- Ahora toca tener paciencia. En siete horas y media, en un lugar cálido (28-30 grados) la masa habrá llegado hasta el borde de los moldes. Si la temperatura es más baja, habrá que esperar más, puede que hasta el doble. Pasado ese tiempo, estarán listos para el horno.
- Precalienta el horno a 200 grados. Cuando esté listo, coge los panettoni, hazles un corte en cruz poco profundo en la cúpula con la cuchilla y ponle en la intersección un almendrita de mantequilla.
- Mételos en el horno en las guías inferiores sobre una bandeja. Nada más meterlos, baja la temperatura a 180 grados. Pasados diez minutos, bájala otra vez a 170 grados. Pasados otros 20 minutos la bajarás de nuevo a 150 y ahí se quedará 15 minutos más, en total, 45 minutos. Ese tiempo vale para piezas medio kilo, para las de un kilo harán falta 10 minutos más a 150 grados, es decir, 55 minutos en total.
- Nada más sacarlo del horno túmbalo sobre la encimera y atraviésalo a media altura con dos brochetas o dos agujas de calcetar en paralelo. Cogiéndolo por las varillas, ponlo boca abajo y cuélgalo así. Puedes hacerlo entre dos sillas, en una olla, entre dos bricks de leche, en una caja… Donde quieras, pero déjalo así otras 10 horas para evitar que baje. Yo uso una caja de madera y ajusto el ancho con cartones de leche.
- Y listo. En una bolsa se te conservará días y días sin mayores problemas. Si es que te dura días y días, que lo dudo.
NUTRICIÓN
Consejos
La masa madre se refresca cada cuatro o cinco horas para evitar que se acidifique. No vale dejarla toda la noche. Es importante que esta masa la hagas con harina Manitoba o de fuerza para que contribuya, con su gluten, a conseguir volumen.
Si vas a amasar a máquina no hace falta que derritas la mantequilla ni que juntes los líquidos por un lado antes de añadirlos a la harina. Esas instrucciones te facilitarán las cosas para amasar a mano.
El formado es muy importante para conseguir una bonita forma al final. Ten paciencia y trata de que te quede una esfera bien prieta. Algún panettone hice sin tener esto muy en cuenta y corres el riesgo de que la cúpula te salga plana: está igual de bueno, pero es mucho menos fardón.
La segunda fermentación es la más desesperante y la menos previsible. Hay trucos: puedes meterlos en una caja y pegarlos a un radiador, por ejemplo. Yo hice lo siguiente: ese día usé el horno, sin quitarle la plancha Celsius, para cocinar. Por la tarde lo dejé enfriar un rato con la puerta abierta. Con un termómetro normal medí la temperatura interior y cuando esta llegó a 31 grados metí los panettoni dentro sobre una bandeja (¡no sobre la plancha!) y los dejé ahí con la puerta cerrada. La plancha Celsius contribuyó a mantener el calor durante toda la tarde y a las siete horas y poco los panettoni asomaban orgullosos la cabeza por encima del borde del molde.
En el horno ten cuidado con esas cabezas. Si ves que se doran en exceso puedes ponerles un trozo de papel de aluminio encima para evitar que se quemen.
Buen día Rodrigo!
Muchas gracias por compartir la receta y los pasos a pasos!
Una duda: la masa madre la dejamos fermentar destapada?
Un abrazo,
Vera
No, Verónica: siempre tapada.
Vale Rodrigo!
Muchas gracias por contestarme!
Un saludo y Feliz Navidad!
Vera
Buenas tardes:
Me he tomado la libertad de hacer un «horario» para que se vea un poco más claro cómo cuadrar los tiempos de elaboración, según los pasos de esta receta de Rodrigo (ojo que no quiero que se malinterprete como si fuera mía). Aquí os lo dejo:
Elaboración:
Masa madre:
1. (Día 1, 12:00) Prepara la masa madre con la que tengas en casa (40 gramos) y añádele 100 gramos de harina Manitoba y 50 de agua. Amasa y deja fermentar en forma de bola en un bol pequeño.
2. (Día 1, 18:00) A las cuatro horas haz un refresco con 50 gramos de esa masa y otros 100 gramos de harina y 50 más de agua. En otras cuatro horas más la tendrás lista.
Aromas:
3. (Día 1, 12:00) Al tiempo que empiezas con la masa madre, prepara los aromas: junta en frasco la miel con la vainilla y las ralladuras y déjalo cerrado hasta el día siguiente.
Primera masa:
4. (Día 1, 22:00) Para la primera masa vierte el agua y la leche sobre 200 gramos del prefermento de masa madre que has preparado en los pasos 1 y 2 y remueve un poco para ablandarla, añade después el resto de los ingredientes, con la mantequilla en pomada, es decir, derretida (vale en el microondas 30 segundos o en un cazo al fuego un minuto) y como mucho, tibia, nunca caliente. Amasa unos minutos hasta que esté todo bien mezclado y la textura sea homogénea. Déjalo reposar 12 horas o hasta que triplique su tamaño.
Segunda masa:
5. (Día 2, 10:00) Para la segunda masa junta los aromas con la miel, la mantequilla, el azúcar, las yemas de huevo, la sal y la malta (opcional) en otro bol. Mézclalo bien con una cuchara. Cuando lo tengas, vierte ese líquido sobre la primera masa.
6. Vete amasando para que se vaya absorbiendo. Bastan un par de minutos. Echa entonces la harina y sigue amasando hasta lograr una masa blanda. Estírala un poco sobre la mesa y agrega las frutas cortadas en daditos. Continúa amasando hasta que las pasas, la naranja y la cidra estén uniformemente distribuidas. Mételo de nuevo en el bol y déjalo reposar una hora.
7. (Día 2, 11:30) Divide con la rasqueta la masa en tres partes iguales de unos 600 gramos cada una.
8. Amasa cada pieza sobre la mesa y dale forma de bola, interesa que quede bien redonda y prieta. Si se pega mucho a la mesa, enharina un poco la superficie con Manitoba. Cuando lo tengas, mete cada bola en su molde.
9. Ahora toca tener paciencia. En siete horas y media, en un lugar cálido (28-30°C) la masa habrá llegado hasta el borde de los moldes. Si la temperatura es más baja, habrá que esperar más, puede que hasta el doble. Pasado ese tiempo, estarán listos para el horno.
10. (Día 2, 18:00) Precalienta el horno a 200°C. Cuando esté listo, coge los panettoni, hazles un corte en cruz poco profundo en la cúpula con la cuchilla y ponle en la intersección una almendrita de mantequilla.
11. (Día 2, 19:30) Mételos en el horno en las guías inferiores sobre una bandeja. Nada más meterlos, baja la temperatura a 180°C. Pasados diez minutos, bájala otra vez a 170°C. Pasados otros 20 minutos la bajarás de nuevo a 150°C y ahí se quedará 15 minutos más, en total, 45 minutos. Ese tiempo vale para piezas de 500 g, para las de un kilo harán falta 10 minutos más a 150°C, es decir, 55 minutos en total.
12. (Día 2, 20:15) Nada más sacarlo del horno túmbalo sobre la encimera y atraviésalo a media altura con dos brochetas o dos agujas de calcetar en paralelo. Cogiéndolo por las varillas, ponlo boca abajo y cuélgalo así. Puedes hacerlo entre dos sillas, en una olla, entre dos bricks de leche, en una caja, etc. Donde quieras, pero déjalo así otras 10 horas para evitar que baje. Yo uso una caja de madera y ajusto el ancho con cartones de leche.
En resumen, empezando el día 1 a eso de las 10:00 tienes los panettones horneados el día 2 a las 20:15 (a falta de que enfríen hasta el día siguiente). Y el reposo de 12 horas lo haces por la noche entre el día 1 y 2.
Espero que os sirva.
¡Muchas gracias, Alberto! Con tu permiso, lo añadimos a la receta.
Perfecto
Muchas gracias Alberto ! Me va a servir muchísimo 😉 Entento hacer mi primer panettone…
Enhorabuena por el panettone hecho con masa madre. Tiene una pinta exquisita. Por mi parte, puedo deciros que para aquellos que quieran llevar un «poco» de cuidado con las grasas saturadas (en este caso sería la mantequilla), os sugiero que la sustituyáis por aceite de oliva virgen extra. De entrada, suena extraño y un tanto arriesgado dado que podríais pensar que el aceite perjudicaría el sabor y el aroma de todo un panettone. Personalmente, y tras varios panettones hechos ya durante años, os puedo que sale riquísimo y no se aprecia el sabor del aceite ni desmejora el aroma de este dulce espectacular. Dicho esto, estoy absolutamente de acuerdo con que el panettone (y fue el primero que elaboré hace años) auténtico es el elaborado con mantequilla. No obstante, entrando en Google dentro de páginas italianas de confiteria, pude encontrar una en la que también elaboraban los panettones con aceite de oliva. Con lo cual…hay para todos los gustos.
Por cierto, podríais colgar una receta para elaborar el PANDORO? Justo hace un año elaboré uno siguiendo las instrucciones del libro PANES Y DULCES ITALIANOS de las Hermanas Simili, y salió buenísimo. No obstante, estoy abierto a nuevas recetas o variaciones. El molde que utilicé fue uno de para realizar «panettones» dado que que el que le corresponde a un PANDORO son a mi entender carísimos.
Felices fiestas a todos. Suerte con el panettone.
Iván
Muchas gracias, Iván.
Ya tenemos una receta de pandoro publicada, aunque me temo que es la misma que la que has usado tú. Ah, y también he usado los moldes de panettone para hacerlo, mucho más económicos 🙂
¡Felices fiestas!
La mantequilla natural es sana,la margarina sí que es muy mala,viene hidrogenadas y al organismo le cuesta digerir las,son muy dañinas las margarinas.
Mil gracias Rodrigo por compartir esta receta. Me pongo a ello!
Una pregunta (quizá vengan más en las próximas 36 horas…), ¿conviene meter un cacharrito con agua en el horneado para mantener la humedad?
No hace falta, Isabel. Es más importante en el pan, en donde se forma una corteza mucho más dura que en estas masas dulces.
Hola, gracias por la receta estoy en ello.
He probado varias y me quedan magdalenas gigantes.
Un par de dudas sencillas, a la segunda masa madre se supone que hay que quitarle 20gr para la elaboración de la primera masa?
Y a la hora del horneado arriba y abajo?
Gracias de antemano.
Saludos.
Hola, Óscar:
Horneado arriba y abajo. De la masa madre, he modificado la receta para que quede más claro: usa los 200 gramos del prefermento de masa madre en la primera masa.
Espero haberte aclarado las dudas. Si no, por aquí sigo.
Muchas gracias.
Están terminando de subir, a ver qué tal el horneado y el resultado.
Por cierto, en paso12, almendra de mantequilla.
Salud.
¡Muchas gracias, Óscar!
Gracias Rodrigo. Por ver si he entendido: una vez hecho el paso 1, me quedo con 50 gramos de esa masa madre, guardo el resto. A esos 50 gr. les añado la harina y el agua y sigo… ¿Es así?
Eso es, Gorka.
Hola, nunca he intentado hacer el panettone y ahora por Navidad a lo mejor hago la prueba, a ver que sale. Yo sólo quería saber si entre el hecho con la pastamadre y el hecho con prefermento de levadura se nota una diferencia de aabor y calidad apreciable como para que valga la pena hacerlo del modo tradicional. Gracias.
Merece mucho la pena, Pablo. Anímate a hacerlo así.
Hola Rodrigo,
Antes de nada darte las gracias por esta receta.
El año pasado me animé a hacer otra con mm al 100% y salió muy rico, me encantó como quedó la esponja y esa miga…..uhmm (era de panarras.com).
Este año me voy a animar con esta receta y por eso quería escribirte, para preguntarte por como queda la miga…se desahace en hebra, queda más compacta.
Mil gracias de nuevo por explicar tan bien las recetas y que nos entren ganas de hacerlas.
Felices Fiestas!!
Hola, Dolores:
A nosotros nos gusta bastante. Sale con una miga muy ligera.
En el paso 2. El refreso de la masa los 50gr. «de esa masa», ¿se refiere a que cojamos otros 50gr. de nuestra masa madre, añadamos la harina y el agua y todo ello lo incorporemos al prefermento que estamos haciendo?
Gorka, se refiere a mezclar 50 gramos de la masa fermentada del paso 1 con más harina y agua. Es otro refresco «seco» más para que el prefermento sea vigoroso pero no ácido.
Puedes guardar la masa que te sobre en la nevera e incorporarla a un pan para darle sabor.
Una pregunta: la temperatura del horno ¿es con ventilación o sin ella?
Sin ventilador, Rubén.
Cuantos días dura el proceso de elaborado por que con estos elevados tan largos.
Gracias!!!!
Maite, unas 36 horas, aunque la mayoría son de reposo.