De pequeña, los bocadillos de mi madre nunca llevaban aceite. Siempre eran de mantequilla con jamón cocido, mantequilla con salchichón, mantequilla con chorizo…
A mí me encantaba porque, no sé si coincidiréis conmigo, el pan con mantequilla es una bendición, la octava maravilla si habláramos de arte. Y si encima el pan está calentito y la mantequilla se derrite… ya es para chuparse los dedos.
Aún así, como todo hijo de vecino, de vez en cuando también pedía mi ración de bollería industrial. Las cañas de chocolate eran mis favoritas, pero los bollicaos también me chiflaban.
Con los años, por esa extraña costumbre de que maduramos, refinamos nuestro paladar y aprendemos a alimentarnos mejor, y habitualmente, dejar de lado la bollería industrial, por ejemplo.
Pero, seamos realistas, un dulce no amarga a nadie y, menos aún, si es casero. Aunque he reconocido que no como bollería industrial, sí que tengo un par de panaderías cerca de casa donde hacen donuts, cañas y palmeras caseras que son de otro planeta. Y, de vez en cuando, se me antojan para merendar.
Sin embargo, los bollicaos siempre suelen ser industriales, no recuerdo haberlos visto en panaderías. Y precisamente por eso decidí ponerme manos a la obra para hacer unos bollicaos caseros con chocolate.
¿El resultado? Dejad que me confiese: el primero que probé aún estaba calentito ^^ Hay que dejarlos enfriar pero olían taaaaaaan bien que no pude resistirme.
Bollicaos caseros que todo el mundo querrá probar
¿QUÉ VAS A NECESITAR?
Ingredientes
- 450 g harina de fuerza El Amasadero
- 225 ml leche entera
- 2 huevos enteros
- 50 g mantequilla a temperatura ambiente
- 5 g levadura seca de panadería
- 1 pizca sal
- 40 g azúcar de caña mascobado ecológico
- ½ cucharadita esencia de vainilla (opcional)
- crema de cacao o ganache
Elaboración paso a paso
- Verter en un bol la leche templada y mezclar con la levadura seca. Ponemos la harina mezclada con un poco de sal en un bol, haciendo forma de volcán. En el centro del volcán incorporamos la leche con la levadura y el huevo batido, el azúcar y la vainilla. Empezamos a amasar y cuando sea una masa uniforme, añadimos la mantequilla en cuadraditos y a temperatura ambiente.
- Ponemos en una mesa de trabajo, sin enharinar. Empezamos a masar, es pegajosa. Después de 10 minutos, empezará a coger textura y será más fácil de amasar. En total, amasar durante 20-25 minutos, dejando reposar cada poco durante 2 minutos.
- Metemos la masa en un bol engrasado y dejamos fermentar hasta que doble su volumen, una hora y media o dos. Dejarla reposar en un lugar cálido, como dentro del horno o el microondas.
- La masa habrá doblado su tamaño. La sacamos del bol con cuidado y la golpeamos suavemente para eliminar el aire de su interior. Dividimos la masa en 10 porciones, de unos 80 gramos. Formamos bolas y lo ponemos en una bandeja con papel de horno. Dejamos reposar la masa 15 o 20 minutos en el interior del horno o el microondas.
- Con cada porción hacemos un rectángulo de 15×15, incorporamos dos cucharadas de crema de cacao. Enrollamos hasta formar un rulo y sellamos los bordes para que no se salga la crema.
- Volvemos a colocarlos sobre el papel de horno y los dejamos fermentar nuevamente unos 45 minutos.
- Precalentamos el horno a 180º. Pincelamos los bollos con leche y los horneamos durante unos 20-30 minutos, dependerá del horno y la potencia que tenga. Si se doran mucho, puedes hornearlos a 175 y ponerles por encima papel de aluminio.
- Retirar del horno y ponerlos sobre una rejilla para que se enfríen. ¡Desprenden un aroma irresistible!
Hola. La crema de cacao para la receta es Nocilla o Nutella?o es otra cosa? Gracias.
La que más te guste, Cris.
si quiero usar MaMa en lugar de levadura, para esta receta que cantidad debería usar? gracias
Usa nuestra calculadora de masa madre para hacer los cálculos.
Jaja que bueno! Esto del hockey engancha mucho. Yo tengo la mayor jugando en categoría alevín y el pequeño en prebenjamín. Así que si jugaste ya te puedes imaginar que me paso el dia llevándolos a entrenamientos y partidos los fines de semana. A mi tambien me encanta, un deporte muy exigente. Lastima que lo haya descubierto hace un par de años. Gracias de nuevo por la receta!