Pan del cuñao de Manuel Vizcarro


Valoraciones: 7 Comentarios

Pan del cuñao de Manuel Vizcarro

Valoraciones: 7 Comentarios
Un pan hecho con el calor residual de las brasas. Dedicado a Luis, cuñao.
receta de pan cuñao

Hay un dicho que se cuenta en mi familia política que dice: “La familia con U pa´ tú”, mis parientes son una fuente inagotable de diretes, motes y chascarrillos.

Soy amigo de Luis desde el principio de la adolescencia. Cuando rondábamos los 25 años, gracias a un cruce entre Venus y Orión, comencé a festejar con su hermana y nos convertimos en cuñados. Ahora nos estamos haciendo maduros juntos. Durante todos estos años de relación hemos seguido siendo muy amigos y de vez en cuando nos comportamos como “cuñaos”, hay veces que en una conversación fluimos de la amistad al cuñadismo sin control, incluso hemos llegado a cambiar de opinión después de un acalorado debate, este hecho siendo aragoneses es casi milagroso.

Cuando aparecí en el pueblo con la Celsius se me quedó mirando y me dijo con ironía:

—Otro cacharrico para pan… ¿esta vez qué tiene de especial?

Después de morderme la lengua y sopesar mis palabras le respondí:

—Ya lo verás… cuñao, ya lo verás…

Aquella “puyita” avivó mi imaginación culinaria. Podría haberle explicado que gracias a la Celsius ha comido pan con unas greñas fabulosas durante años pero igual nos perdíamos en divagaciones técnicas, decidí experimentar con su intelecto y su curiosidad.

El domingo de barbacoa coloqué la Celsius al lado de la fogata, fue cogiendo temperatura a la vez que se quemaba la leña. Hice a la plancha calabacines y tomates, los reservé en un colador para que perdieran agua, el líquido lo reduje con un poco de salsa de soja y tabasco, posteriormente hicimos la brasa típica de nuestra zona: cordero y longaniza. Cuando estaba bien farto y abordaba al postre le escuché de fondo:

—Pues como plancha funciona muy bien…

Sonreí entre dientes pero no quise hacer sangre y me guardé cualquier comentario.

Al acabar de asar enterré con las brasas sobrantes la Celsius. Mi “cuñao” oteaba desde la distancia extrañado y no pudo más que preguntarme:

—¿Por qué sepultas la plancha?

—Por la noche lo sabrás…(le dije con cierta malicia)

El día anterior había preparado una masa recia, un pesto de almendras y albahaca y una salsa de yogur con pepino.

Por la noche cuando volvimos de la piscina, formé dos panes en formato de cañada, coca o pan persa. Agrupé las brasas casi muertas a un lado y coloqué los panes encima de la Celsius, esperé unos minutos, curioso mi amigo Luis dijo:

—Los estás haciendo con el calor residual, muy interesante…

Les dí la vuelta, regándolos con el pesto de albahaca, para que acabarán la cocción dispuse un papel de aluminio sobre los mismos y los cubrí con las pocas brasas que quedaban al poco tiempo el pan estaba hecho.

Corte los panes en triángulos y puse en un bol la salsa de yogur y pepino, lo llevé a la mesa.

—Has visto el uso de la Celsius Luis… ¿Qué, es este otro “cacharrico”?

—Un aperitivo fresco y excelso “cuñao”, con solo azuzarte un poco eres capaz de cosas grandes, bien se vale de mí.

—Cuñauuuuuuu (respondí con voz del Risitas).

Soltamos unas carcajadas notorias y dijimos al unísono:

—La familia con U pa` tú”.

Nosotros utilizamos leña porque tenemos acceso a ella. No he probado con carbón vegetal para barbacoas, creo que tiene una capacidad calorífica mayor por lo que supongo que puede dar unos resultados sorprendentes. Si algo nos ha aportado ser panaderos caseros es intentar llevar al límite los utensilios que tenemos y la Celsius es casi indestructible.

receta de pan cuñao

Pan del cuñao de Manuel Vizcarro

Un pan hecho con el calor residual de las brasas. Dedicado a Luis, cuñao.
4.88 de 8 votos
Plato Pan
Cocina Panadería casera

Ingredientes
  

Para la masa de pan

Pesto de almendras

Salsa de yogur

  • 270 g pepino rayado
  • 250 g yogur griego
  • 1 ajo pequeño
  • 5 g sal

Elaboración paso a paso
 

  • Juntar todos los ingredientes del pan y amasar con reposos. Con estos días de calor es muy bueno que el agua esté muy fría.
  • Dejarla reposar 3 horas a temperatura ambiente, desgasificar y dejar en la nevera al menos 24 horas, dentro de un tuper con tapa.
  • Hacer un buen fuego para hacer tu barbacoa o brasada preferida.
  • Si quieres puedes poner la Celsius al lado y cocinar a la plancha.
  • ALERTA para los Panarras gafotas como yo, acercarse mucho al calor del horno o de la barbacoa con cristales orgánicos los acaba estropeando, ningún óptico te avisa simplemente porque no cree que seas un obseso del pan. Las gafas de la izquierda son solamente para la brasa y el horno, cuando me pongo los guantes, me pongo esas gafas.
  • La semolina es mágica para formar panes planos, además de que ensucia mucho menos que la harina blanca. Estirar las masas hasta tener dos lenguas de pan recio.
  • Colocar las piezas en la pala de pizzero o en lo que tengas.
  • Apartar las cenizas de la Celsius y pasar un trapo para eliminar restos gruesos.
  • Colocar con mimo las masas sobre la plancha rusiente, el sonido es magia.
  • Pasados 10 minutos o menos, depende del calor que haya conservado la Celsius, darle la vuelta a los panes y pintar con el pesto de almendras el lado tostado.
  • Ubicar un papel de aluminio de varias hojas encima de los panes y cubrir con lo que quede de las brasas.
  • Esperamos unos minutos y vamos comprobando la cocción.
  • En pocos minutos lucirán así de brillantes.

Pesto de almendras

  • Triturar todos los ingredientes con un punto de sal hasta que quede homogéneo.

Salsa de yogur

  • Ralla un pepino y mezcla con 5 gramos de sal, ponlo en un colador, empezará a perder agua de manera inmediata, déjalo reposando al menos una hora.
  • Pica fino el ajo y júntalo con el yogur griego, el pepino y un chorro de aceite de oliva y resérvalo en la nevera.
  • Lleva el pan recio a la mesa y unta directamente en la salsa de yogur.

Entradas recientes

Todas las categorías