Springbrötchen: Los Springbrötchen son panecillos alemanes suaves y esponjosos con una corteza crujiente y agrietada. Se pueden disfrutar como acompañamiento de comidas o como base para hacer sándwiches. Estos panecillos son versátiles y deliciosos, y agregarán un toque especial a tus comidas.
Amasar todos los ingredientes de la masa, que será blanda (no debe ser demasiado firme).
Cubrir la masa y dejarla reposar durante 20 minutos en un lugar cálido.
Tras el reposo, hacer un rollo con la masa y dividirla en 12 trozos.
Forma una bola con cada trozo: para esto cubre un trozo de masa con la mano y haz movimientos circulares sobre la encimera. El pulgar debe tocar el dedo indice; la masa, la palma de la mano y las yemas de los dedos, la encimera.
Colóquela con el lado liso arriba en una bandeja forrada con papel para hornear. Después de unos 10 minutos, aplane ligeramente la masa.
Ahora preparamos la pasta para untar, mezclando energicamente con 200 ml de agua hirviendo con una cucharada de harina.
Untamos las bolas de masa con un pincel de cocina. Cuando la superficie de la masa comience a secarse, untamos de nuevo y dejamos secar.
Tras una fermentación de 1 hora a 1 hora y media (dependerá de la temperatura de tu cocina), preparamos la glasa final derritiendo la mantequilla clarificada, dejando enfriar hasta unos 50°C aproximadamente y mezclando con el bicarbonato de amonio.
Aplicamos la glasa a los trozos de masa.
Dejamos reposar un momento y metemos en el horno precalentado. Temperatura de cocción: primero 250°C, luego inmediatamente bajar a 200°C. Tiempo de cocción: aprox. 20 minutos.
Notas
Nosotros recomendamos usar entre 2 y 3 gramos de levadura seca por cada 500 gramos de harina. Sin embargo, en las recetas que nos envian nuestros clientes respetamos las cantidades que ellos usan.