Mezcla los ingredientes y amasa sobre la encimera unos minutos hasta conseguir una masa suave.
Deja reposar media hora en el bol tapado.
Estira la masa en forma de salchicha y divídela en siete partes iguales. Forma pequeñas bolitas con cada una de ellas haciéndolas girar con una mano sobre la encimera. Cúbrelas, en la misma encimera, con un paño limpio y déjalas reposar 45 minutos.
Aplana una de las bolas de masa con la mano y sigue estirando con un rodillo hasta lograr un grosor de un par de milímetros. No hace falta que quede como papel de fumar. Esta operación puedes hacerla sobre una hoja de papel de horno enharinada porque te resultará más fácil después despegar la piadina y llevarla a la sartén. Si lo haces directamente sobre la encimera o la mesa, enharina bien la superficie para que no se pegue. Para lograr una piadina perfecta, una vez estirada corta círculos con un molde que tengas por casa, o con la tapa redonda de una caja de galletas danesas…
Emplea una sartén de fondo grueso para hacerlas. Caliéntala a fuego medio y dispón sobre ella una piadina. Muévela de cuando en cuando para que se haga por todas partes igual. Con un par de minutos por cada lado, llega. Repite el proceso con el resto de bolitas de masa.
Con la piadina caliente dispón el relleno y dóblala por la mitad presionando para que quede plegada. Si se te enfría mientras haces las demás, puedes darle un toque de nuevo en la sartén, ya montada y doblada, para que llegue al plato calentita.
Notas
Recuerda que si te sobra masa puedes guardarla, en una bolsa, en la nevera. Cuando la quieras usar bastará con que la pases por la sartén para que te quede perfecta.La receta tradicional de la piadina emplea manteca de cerdo, aún así, si quieres sustituirla por otra grasa, puedes emplear un aceite de oliva suave. Cambia los 90 gramos de manteca de la receta por 70 de aceite y listo.