Espolvoreamos con harina, cubrimos con un paño y dejamos que doble su volumen. Mientras, precalentamos el horno a 220º.
Horneamos durante 25 minutos. Lo sacamos del molde, lo tumbamos sobre un costado y lo dejamos otros 8 minutos. Le damos la vuelta y lo dejamos otros 8 minutos sobre el otro costado.
Lo sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Welsh rarebit
En un cazo, doramos ligeramente la harina en la mantequilla.
Añadimos la botella de cerveza, la salsa Worcestershire, la mostaza y una pizca de cayena en polvo.
Removemos y dejamos que hierva un par de minutos.
Bajamos el fuego y añadimos el queso. Revolvemos bien hasta que se derrita y dejamos enfriar.
Tostamos tantas rebanadas de pan como necesitemos. Una vez tostadas, las untamos generosamente con la mezcla anterior y ponemos a gratinar en el horno. Cuando se empiecen a dorar, servimos.
Notas
Excelente entrante con un buen vino blanco muy seco.