Sobre esta receta
La primera vez que comí sopa miso fue en un restaurante de Barcelona. Todavía recuerdo esa cucharada primera, ese sabor del caldo que conforta. Hay algo milenario en los sabores japoneses, algo sutil y delicado como la pintura caligráfica, como la gran ola de Hokusai. Hay platos que son un país y hay ingredientes que también son un país, como la soja. El miso es soja fermentada, aunque también existen diferentes tipos realizados con cebada o con arroz. Hoy utilizamos la variedad más antigua y la que más me gusta, el hatcho miso, porque tiene un sabor intenso, un poderío umami en la boca.
Es verdad que después de hacer el caldo unas quinientas veces, se abandona el paquete en el frigorífico hasta que las botellas lo deslizan hacia el fondo donde viven las mermeladas y la salsa de soja y todas las cosas de un uso particular. Para solventar el problema os proponemos un uso diferente del miso combinado con fideos udon de trigo que toman de la salsa todo el sabor: el trabajo arqueológico neveril siempre tiene su recompensa. Acompañamos los fideos con pepino y cilantro fresco que le aportan frescura y contraste a la salsa. Os llevará directamente a la ladera del Monte Fuji, impresionante.
Qué voy a necesitar
- Una cacerola
- Un bol mediano
Ingredientes (Para 1 ración grande)
Para la salsa
- 1 cucharada colmada de hatcho miso
- 1 cucharada de crema de cacahuete
- 1 cucharada de aceite de sésamo tostado
- 1/2 cucharada de tu salsa picante favorita (opcional)
- 1 cucharada de salsa de soja
- 1/2 cucharada de sirope de arce
- 1/2 cucharada de vinagre de arroz
- 1 cucharadita de ajo picado
- Cebollino picado
- 100 g de fideos udon semi-integrales finos de trigo ecológico
- Pepino
- Cilantro fresco
Elaboración
- Mezcla todos los ingredientes de la salsa en un bol.
- Corta el pepino en bastones pequeños y enjuaga el cilantro fresco.
- Pon a hervir 1 litro de agua, añade los fideos y remueve. Hiérvelos a fuego lento durante 10 minutos y después enjuágalos brevemente en agua fría.
- Traslada los fideos al recipiente de la salsa y mezcla para que queden bien impregnados.
- Sírvelos acompañados de pepino y unas ramas de cilantro.